domingo, 19 de julio de 2009

Orgullo y prejuicio, Jane Austen.


Con frecuencia he observado lo poco que les interesan a las jóvenes los libros de temas serios, a pesar de que fueron escritos por su bien. Confieso que me asombra, pues no puede haber nada tan ventajoso para ellas como la instrucción. Pero no quiero seguir importunando a mi primita.

Se dirigió al señor Bennet y le propuso una partida de backgammon. El señor Bennet aceptó el desafío y encontró que obraba muy sabiamente al dejar que las muchachas se divirtiesen con sus frivolidades. La señora Bennet y sus hijas se deshicieron en disculpas por la interrupción de Lydia y le prometieron que no volvería a suceder si quería seguir leyendo. Pero collins les aseguró que no estaba enojado con su prima y que nunca podría interpretar lo que había hecho como una ofensa; y, sentándose en otra mesa con el señor Bennet, se dispuso a jugar al Backgammon.

Orgullo y prejuicio, Jane Austen


2 comentarios:

Queso y aceitunas dijo...

No he podido evitarlo:

Orgullo, Prejuicio y...Zombies!

;-)

Nikita dijo...

Sí, ya lo había visto pero no lo recordaba XDXD
Gracias por el enlace!